Hace unos días recibí esta información que ahora comento.
Me llamó la atención porque ella viene precedida de un
título bien rimbombante, “Hambre en Estados Unidos” y es algo que, aunque no
nos parezca, puede pasar y de hecho pasa.
La investigación, que no trae muchos datos adicionales para
poder valorarla, estuvo hecha por Wells Fargo, uno de los bancos nacionales más
grandes y famosos dentro de la Unión, que es además el banco donde tengo puesto mi
poquito dinero, por lo que digamos conozco su funcionamiento a groso modo.
Confiando en el prestigio del banco, más allá de si es bueno
o no para muchos, me arriesgo a publicarla.
Me he quedado con ganas de sabes más, o sea, a qué llaman
hambre y cuáles son los parámetros que utilizaron para medirla, porque a primera vista, la comida aquí está que da al pecho en todas las esquinas. dudo mucho que exista un país donde se venda tanta comida, en todas sus variantes, de todos los países del mundo como en Estados Unidos. Entonces lo que yo he
podido experimentar es sencillamente lo contrario, las personas compran y
compran sin límites, muchas veces para luego, sin consumir, echar a la basura.
Trabajé casi 6 años como mantenimiento en un residencial,
por lo que mi misión en el 98% de los casos era trabajar dentro de los
apartamentos y para si fuera poco, muchas veces con tareas asignadas dentro de
los refrigeradores, entonces si hay algo que he visto en todo este tiempo es
comida, cocinada, semi cocinada, cruda, etc.
En líneas generales los ciudadanos norteamericanos son
acusados por su alto nivel de consumo, cosa que puedo asegurar que es cierta,
sin que yo pueda calificar a todo el mundo por igual. He visto a muchas
personas racionales, sacar cuentas diarias de lo que van a comprar y consumir. No todo el mundo está constantemente echando su dinero sobre cualquier cosa.
Por otra parte, existen muchas facilidades. Primero los salarios,
generalmente dignos, alcanzan para vivir el mes. Segundo existen innumerables
soluciones a partir de créditos, tarjetas, préstamos, etc., que hacen la vida
más llevadera. Tercero a los más necesitados se les aplican determinados planes
de ayuda que incluyen dinero en efectivo y bonos para comprar comidas. Cuarto
existen muchas instituciones, como por ejemplo las iglesias de todas las
denominaciones religiosas, los gobiernos estatales y el propio gobierno federal, que, entre sus misiones más importantes, tienen la
de ayudar a los más necesitados, donde incluyen la entrega de comidas, ropas,
muebles, medicamentos, atención médica, etc., de forma gratuita.
Claro que este es un país de más de 300 millones de
personas, y siempre hay determinados sectores sociales, familias negras,
inmigrantes, personas que viven ilegales, que aparentemente pasan más trabajo
para vivir.
A veces es complicado de evaluar, porque existen muchas
personas y familias que prefieren vivir de la ayuda del gobierno y no trabajar
8 horas y entonces la ayuda, puede resultar insuficiente, porque es sólo eso,
una ayuda.
La información sobre el hambre que da Wells Fargo, que para mi gusto es incompleta porque sólo presenta el resultado, puede estar poniendo el dedo en algo real, que la mayor parte de los mortales desconocemos por no ser este el objeto de nuestras vidas. Claro que, imagino que los
niveles de hambre a los que se refieren, y que no queda aclarado cuáles son, en
principio no tienen que ver nada con el hambre en Haití, parte de África y
parte de Latinoamérica. El hambre a la que se refiere el estudio debe ser al
hambre norteamericana, que, a mi humilde modo de ver, dista mucho de ser algo
extremadamente complicado.
No obstante, sería algo en lo cual pensar, porque, como debemos
saber, todo lo que aparentemente brilla no es oro, dista mucho este país de ser
esa imagen súper dorada que muchos tenemos cuando vivimos fuera de él, aunque dorado es.
He visto personas pedir dinero y cigarros, pero muchas veces
es para poder fumar, tomar alcohol y, peor aún, comprar drogas. No he visto en
mis 6 años aquí, a alguien revisando la basura para sacar un pedazo de pizza
viejo y comerla. Conozco historias de homeless que la pasan mal, pero cuando
averiguas, muchos viven en refugios del gobierno, reciben atención médica, y
tres comidas calientes al día gratis, sólo que, por determinadas razones, han parado
en esa forma de vida y les cuesta trabajo salir de ella, por otras determinadas
razones.
A simple vista no existe aquí adentro el hambre, por el contrario, el pueblo norteamericano es reconocido por la gordura. El sobre peso, ese sobre peso ya como enfermedad grave, es algo que se detecta fácilmente con sólo pasar la vista no sólo en adultos, sino también, lamentablemente en los niños. Por otro lado, habría que ver la cantidad de comida que se compra en una familia trabajadora sin mucha idea de lo que es sano o no. Resulta por momentos impresionante ver aquellos dos e incluso tres carros llenos de comidas que se pasean por los súper en busca de las cajas registradoras. Luego cada cinco metros se encuentra un lugar para comer, restaurantes, cafeterías, negocios de comidas rápidas, farmacias, servicentros, carritos con comidas en las calles, etc., todo lo que genera que las personas, lejos de pasar hambre, se pasen el día con algo en las manos para comer y tomar.
Sin embargo, para no pecar de ingenuos, debe existir y según Wells Fargo existe, un grupo, que visto de forma general pueden sumar millones, digamos más afectado que no accede a ninguna de estas formas y se las ven más complicados a la hora de llevarse algo al estómago. No lo dudo, aunque no lo puedo asegurar, porque no lo he vivido y no conozco a nadie que lo viva diariamente.
Es un tema bien
complicado, abierto de por y para siempre al debate. Muchas veces podrá depender
de realidades económicas indiscutiblemente malas y otras de factores selectivos
que condicionan el ganar dinero y luego dónde y cómo se invierte. Es probable que,
si eres una madre soltera y has tenido 8 hijos que aún son pequeños, con
diferentes padres no responsables y vivas de la ayuda del gobierno, te resulte
más difícil asegurar una buena alimentación. Es cierto que, si eres drogadicto
o bebedor empedernido, prefieras tomar cervezas o fumarte una mariguana antes
de comer algo sano de forma sistemática. Es muy entendible que si eres ilegal y
no encuentras trabajo estable y para colmo tienes 6 hijos, es más probable que
tengas las condiciones para garantizar una dieta digna y estable. Si no tienes
trabajo, a veces porque no lo consigues, otras porque no quieres trabajar y
estás escogiendo, pues tengas problemas a la hora de comprar la leche diaria. Es
conocido de que si prefieres vestir de lujo, tener el último celular de moda y
salir con tus amigos, tengas límites a la hora de comprar el pan.
Muchas veces el
tema del hambre engaña y conmueve sobre todo cuando se anuncia en grandes titulares, sin
que yo quiera ahora por esta vía desconocerla o justificarla. Muchas veces el
hambre, me refiero solo y exclusivamente a los Estados Unidos, es el resultado
de una mala planificación y sobre todo de una no prioridad de algunos temas
prioritarios.
En mi caso
particular, que podría ser ahora un buen ejemplo, cuando llegué aquí hace ya 6
años, vine sin dinero o con muy poquito dinero y lo primero que hice fue
buscarme un trabajo, el más fuerte que he hecho en toda mi vida. Trabajamos Jonathan
y yo, por momentos uno de los dos únicamente. Nos vestimos con ropa de Goodwill,
comprada a precios módicos de 3, 5 dólares y disfrutamos de los muebles que nos
regaló una de las instituciones religiosas que existen en Lincoln. Íbamos, debo
reconocer a veces a regañadientes empujados por Martica, a hacer colas todos
los domingos para recibir alimentos gratis, sólo teníamos un solo automóvil para
todos y todo, no comíamos en restaurantes, no íbamos a cines y no compramos
cosas a través de Amazon.com, pero nunca, exactamente nunca, dejamos de comer
bien, porque sabíamos lo que significa priorizar lo que se tiene que priorizar.