El Coronavirus desde mi casa. Marzo 2020. (Segunda parte)

Nadie ha dicho que hay que estar triste, sólo hay que informarse y tratar de protegerse y proteger a los que nos rodean. Entonces, como aún soy joven y los jóvenes tenemos una licencia para actuar, teníamos una cita programa para celebrar mi cumpleaños y nos fuimos a celebrar, manteniendo estrictamente las reglas de cuidado. Lincoln tiene sólo dos casos registrados del virus y están ya bajo control. El lugar, bello, además ofrece una comida griega no para morir, sino para vivir. Aquí las fotos, estamos sanos.

Cuba, la bella isla del Caribe, está metida, al ser yo cubano, en el mismo centro de mí colimador. A veces trato de mover la mira telescópica y mirar a otro objetivo, pero al final, ella, la mira, tal como si estuviera programada automáticamente, regresa y vuelve a enfocar. No puedo apartarme de Cuba, no porque sea mí lugar de origen, igual no soy tan patriota, sino porque tengo allí a muy cercanos familiares, entonces lo que pasa diariamente me interesa.

El gobierno cubano, sus decisiones, sus políticas, sus frases triunfalistas, su demagógica propaganda, hace que se lleven al límite los sentimientos, muchas veces, encontrados, sobre determinados procesos o puntuales hechos. Creo que no existe nada perfecto, todo tiene aspectos positivos y negativos, todo depende de quién y cómo se mire, sobre todo porque toda mirada tiene de respaldo determinadas posiciones e intereses. Nada es todo absolutamente para todos.

Es cierto e imposible de ocultar que aquello está pasando por un momento difícil, creo yo que más difícil que todos los anteriores, sin Fidel como master chef o maestro de orquesta y entonces abunda lo negativo. El deterioro en todos los órdenes se impone. No economía, entonces casi nada posible, mucho rescate de la propaganda política ideológica sin base, sin respaldo, sin hechos reales a mostrar y comprobar. Mucho Martí, poca comida. 

Pretensiones de parar el tiempo para esperar un milagro, que, ni la Biblia es capaz de describir. Jesús se levantó a los tres días, se revivió él mismo, pero cuando le preguntaron sobre Cuba, se rascó la cabeza, miró a su interlocutor con cara de asombro y echó a caminar hasta perderse y no ha vuelto. Todavía hoy, cuando los que lo encuentran le preguntan por Cuba, dicen que sólo puede poner cara de carnero degollado y eso que es Jesús, el hijo escogido de Dios.

Bueno Cuba, sobre todo entre cubanos, siempre está presente y su presencia inevitablemente es política, no importa si hablamos de deporte, de recogida de papas, de edificios que se caen y barrios sin agua, ahora obviamente el Coronavirus y pienso que es así, porque desde hace seis décadas hemos estado sometidos a estos análisis, tanto que han llegado a crear vicios. La propaganda se llevó siempre, para todo, incluso hasta los que nacían, porque simbolizaban un por ciento a exhibir para las comparaciones convenientes con otros países, los que se graduaban de las escuelas a todos niveles formaron parte de las estadísticas de títulos repartidos, que no siempre tenían que ver con los verdaderos conocimientos, los que morían viejitos como resultado de la atención al adulto mayor, hasta la simple idea de unos carnavales revolucionarios donde el pueblo cubano ratificaba sus compromisos con “su revolución” a golpe de música, bailes y ron y algunas brocas.

La noticia más sonada a raíz del tema Coronavirus, es la de que el gobierno, porque, aunque se habla de Cuba, fue el gobierno, como todos los gobiernos, el que tomó la decisión y para nada tiene que ver el pueblo, aceptó la entrada de un crucero que traía personas infectadas con el virus. Y aquí tengo que decir que estoy a “50 a 50” con la decisión. El asunto no es estar siempre en contra por estar.

Varios países del mundo se negaron a recibir al barco y entonces Cuba lo recibió, previa coordinación con el gobierno inglés. La idea era clara y, al parecer, fue bien ejecutada, dejar entrar al barco por el puerto de Mariel, no por el de La Habana, inmediatamente trasladar a los pasajeros y tripulación en guaguas hasta el aeropuerto, o sea, no dejarlos hacer turismo, ni pasear, ni comer, ni tirarse fotos y embarcarlos para el país de origen en aviones ingleses, que ya estaban listos esperando.

Para muchos esto fue una acción de enorme irresponsabilidad, o sea, dejar entrar a infestados al país, para otros es una buena acción, sobre todo, humanitaria. Claro, para el gobierno, acostumbrado y necesitado de apoyo propagandístico, es el resultado de la revolución comunista, de la fortaleza de las ideas, de la solidaridad entre los pueblos y del gobierno más humanitario del mundo. Eso no debe extrañar, eso es lo de siempre, más de lo mismo. La foto que ha dado la vuelta al mundo es una tela blanca con letras de imprenta rojas que decía, “Gracias Cuba” portada por tres ingleses y un médico cubano en la escalerilla del barco. Cartel que voy a creer que fue ideado e impreso voluntariamente por los turistas ingleses agradecidos, de momento es mejor no creer otra cosa.

Entonces yo pienso, la acción conllevaba riesgo, pero todas las acciones lo llevan. Ahora frente al virus, los riesgos son grandes, pero, tal como le decía a Jennifer en uno de nuestros debates telefónicos, si uno de mis hijos viniera en el barco o yo mismo estuviera sobre ese hotel marítimo, agradecería enormemente la decisión. Si uno de mis hijos viniera contagiado o no, en ese bote, agradecería de por vida, la solución humanitaria de un gobierno de recibirlos y, sobre todo, embarcarlos rápidamente al país donde yo estoy para poder recibir atención médica. En un momento como este parece que cada minuto cuenta, por lo que dejar un barco en el mar con contaminados arriba, significaba sacrificar o condenar a todos al contagio y, por la demora del tratamiento, a la muerte.

Los bomberos se arriesgan todos los días para salvar vidas en los derrumbes e incendios, acabo de leer en una de mis National Geographic, sobre la existencia de un grupo élite, super profesional y extremadamente bien preparados de hombres que luchan contra los incendios gigantescos en Alaska. Grupo reducido de hombres, tirados en paracaídas, que luchan por salvar miles de hectáreas de enormes fuegos. Los policías se arriesgan todos los días, exponiendo incluso sus vidas, frente a delincuentes armados y dispuestos a matar. Los médicos ahora, pero siempre, han estado dispuestos a salvar vidas en este y otros virus, hombres y mujeres que arriesgan sus vidas para salvar a personas que han quedado dentro de una tormenta en el medio del océano o han sido arrastrados por una avalancha de nieve o un alud de fango.

Creo que la idea del barco es humanitaria, que para nada tiene que ver con una ideología, es una acción para salvar a personas que todo país, todo gobierno y todas las personas deberíamos priorizar. Los gobiernos que no recibieron al crucero, sus razones y análisis tendrán, la historia les pasará la cuenta. Claro, siempre aparece la información de que el gobierno cubano cobró unos millones de dólares por la acción, esto no me consta, porque como siempre ese gobierno, dueño de la información, la esconde. Los cubanos nunca hemos sabido y aún no sabemos, por ejemplo, qué se hace con el dinero que producimos, que enviamos o que llega, entonces, hay aparece mi otro 50%, si se cobró por recibir personas enfermas, la acción deja de ser todo lo linda y humanitaria que yo mismo acabo de reconocer.

Nuestra historia recoge que muchas embarcaciones privadas, cerca de las costas de Estados Unidos, al no poder rescatar a los que navegaban, “balseros cubanos”, les daban gratis agua, comidas, medicinas, orientaban y daban ánimo para que siguieran navegando hacia costas norteamericanas. Mucho en avionetas viejas, se dedicaron a dar indicaciones, sin cobrar nada, a otros para salvar a muchas de esas naves, que de no ser por esas acciones hubieran muerto en el mar. Los médicos cubanos llevan más de 50 años regados por el mundo, por política, por negocio, por compromisos, por escape, no importa, ayudando a otros a nacer, a no morir, etc. Los médicos cubanos han sido utilizados como productos, en ellos ha podido primar la idea noble de salvar vidas, para sus patrones ha primado la idea del dinero, no vamos a creer que, desde Cuba, sin medicinas, sin médicos, el gobierno cubano está interesado en salvar a la humanidad.

Si el gobierno en cuestión utiliza esa acción y parte de su comitiva, actores dependientes y comprometidos, lo apoya como un logro ideológico y político, primero no es nada nuevo, de eso como ya escribí, hemos comido y bebido durante muchos años; segundo, no es nada exclusivo, la ideología y propaganda ha existido desde hace muchos siglos, y, tercero, ese será el sueño del gobierno, mérito que para nada lo salvará de los errores y problemas que aún no resuelve. Para el pueblo de Cuba, después que pasó el incidente del crucero, política o humanitarismo, el problema es el agua potable, las casas, la comida, los medicamentos, los salarios, la libertad de expresión, de reunión, la posibilidad de decidir libremente, la acción de participar en el enriquecimiento propio y de su país, etc.

Sin embargo, a pesar del crucero, existen otras acciones para evaluar. Cuba es una isla, cosa que le ha funcionado para bien y para mal. No tiene fronteras fáciles de pasar caminando, por lo que el virus no podía llegar nadando. Es una enorme irresponsabilidad que, hasta hace sólo 2 días, ese gobierno mantuviera sus aeropuertos y puertos abiertos al exterior. Es una irresponsabilidad sabiendo que los primeros detectados con el virus fueron tres italianos turistas, que el gobierno haya mantenido, bajo conciencia y porfía, la idea de que no pasaba nada, de que todo estaba controlado y que Cuba estaría abierta para todos aquellos, que ahora, en medio de lo que está ocurriendo, quisieran visitar la isla para “turistear”, o sea, caminar, tomarse fotos, pasear, comer, beber y sobre todo, tener contactos, a veces sexuales, con la población cubana.

¿Turismo en medio del Coronavirus? Si y esto si es una irresponsabilidad muy grande. He visto a una señora, según dicen que es la responsable de marketing del turismo, pero que su cara y discurso delatan que es más una funcionaria política del gobierno, confiable, que dirige a otros especialistas, frente a las cámaras de TV, declarar orgullosa que ellos, el turismo en Cuba, estaban preparados para recibir a los turistas, que no pasaba nada. ¿Esta persona fue removida de sus funciones por homicida?

Peor, he visto un anuncio comercial, una publicidad de HavanaTur, que pertenece al Ministerio de Turismo, que pertenece al gobierno cubano, que por cierto hace pocas horas fue retirada, promocionando y estimulando los viajes a Cuba como destino seguro. Ahora en medio del Coronavirus, miles de muertos en China, España, Italia, muchos casos de contagio en otros países, Rusia, Alemania, Estados Unidos. Los países protegiendo sus fronteras para evitar la propagación, los países recogiendo a sus ciudadanos por el mundo para regresarlos a casa, los ingleses enviando dos aviones a Cuba para rescatar, poner a salvo y dar atención médica a sus ciudadanos infestados dentro de un crucero y Cuba, nada más y nada menos, Cuba, un país desecho, sin economía, sin comida y sin medicamentos, estuvo todo este tiempo, tratando de maximizar y capturar a los turistas locos y perdidos.

Cuba, Sol, playa, música, pero también jineteros y jineteras, mercado negro alrededor del turismo, etc., irresponsablemente mantuvo el país abierto y peor, hizo publicidad para atraer a los turistas, para, ahora sin nada de humanitario, ganar dinero en medio de la crisis. Ya, nada más por esto, sin contar todo lo demás, el gobierno debería ser cuestionado. Aquí si no hay humanitarismo, aquí no hay defensa de nada, sólo lo que existe por parte del turismo, que los que conocemos Cuba sabemos que tiene que estar autorizado por el máximo nivel del gobierno, por lo que ahora no se podrán hacer los tontos o desconocedores, tal como pasó con la cocaína de Ochoa y Tony de la Guardia, es la idea de ganar dinero.

Pero hijos de puta, ¿cómo se les ocurre ganar dinero, atrayendo a turistas internacionales, que pueden estar inconscientemente infestados y con esa acción, poner en el futuro en riesgos de muerte a miles de tus ciudadanos?, ¿A quién se le puede ocurrir atraer unos cuantos dólares, poniendo en riesgo el sistema de salud de un pueblo entero, que ni con los dólares recaudados, ni con el doble, ni el triple, luego podrán resolver? Si España, Italia, China, Estados Unidos, países con economías para comprar a Cuba entera, con todos los cubanos dentro, más todo el famoso gobierno distinto, están dando gritos por no poder enfrentar lo que les pasa, están pidiendo por favor que se les ayude, están teniendo que decidir quién vive, o sea, a quién salvar y a quién no, por triste incapacidad no por falta de voluntad, cómo al gobierno cubano, con frases de siempre, o sea, pura demagogia, pura politiquería, porfía que todo está cuadrado, que puede enfrentar la mayor contaminación o contagio que pueda existir en la humanidad. ¿Serán dementes? Pregunto por demencia, porque es conocido que, a lo largo de la historia, muchos jefes, dirigentes, presidentes y gobiernos han caído en acciones demenciales, en contra de toda lógica, de todo raciocinio y se han llevado por delante a un pueblo entero.

¿Está todo garantizado? Pero, ¿cómo? Si en el mismo momento que uno de los nietos de Fidel, sin pudor, sube una foto portando una mascarilla super moderna y profesional que se usa para combatir el virus, el gobierno cubano está orientando a la población que se construyan sus propios tapabocas con tela, en un país donde tela e hilo no hay desde hace muchos años. Sálvense quien pueda, deberían decir. ¿Está todo garantizado? Y El Terrible, me dice que recorrió varias farmacias con 9 recetas para medicamentos y sólo consiguió uno de ellos. ¿Está todo garantizado? Y entonces los cubanos de la isla están llamando a sus familiares, los enemigos de la revolución, sobre los que ahora se dice que quieren dividir a la familia cubana, para pedir mascarillas, medicinas, productos de aseo, etc., que tendrán que pagar precios altos para hacer llegar esos productos necesarios a sus familiares y amigos. ¿Qué está garantizado más allá del nieto de Fidel? Claro, siempre aparece por la TV oficial, la imagen de una viejita cubana, una abuela, una vecina, que, con sus recursos, confecciona tapabocas que regala a sus amigos y vecinos. Esa es la imagen de solidaridad, que se utilizan para convencer que se está preparado, como las de las abuelitas lindas de los cuentos de niños, es la que da la vuelta al mundo.

Las escuelas, los bares, los teatros, etc. Es criminal. Mientras el mundo ha suspendido todas las clases de todos los niveles educacionales, creando mecanismo para que los estudiantes puedan estar en sus casas, recibiendo clases por internet e incluso meriendas organizadas diariamente, Cuba mantiene sus escuelas abiertas, pero más, los bares, los restaurantes, etc. He visto fotos de enormes filas de cubanos en Coppelia para tomar helados. Hoy, tomar helados. Las guaguas siguen repletas, donde todos sabemos que no queda más remedio que respirarle o quitarle el aire al que va al lado. El enorme crucero era un peligro, aunque por el tamaño del buque las personas podían estar separadas por metros, entonces las guaguas cubanas, donde lo único que falta es meterse dentro de las tetas, las nalgas, los bolsillos del que va al lado, las guaguas cubanas donde hemos ido y van las personas tan pegadas que sólo el grueso de las ropas es lo que las separa. Las guaguas cubanas, donde uno nunca sabe si la pegazón es producto de la necesidad, o es que además las personas de ambos sexos se están arrascando, masturbando, acariciando con tu cuerpo.

Las directoras de escuelas se niegan a aceptar a niños con tapabocas, porque el Ministerio de Educación no lo ha orientado. Contradicción, el gobierno a través de la TV orienta el tapabocas para protegerse y evitar la contaminación y las escuelas prohíben su uso. He visto discusiones de madres con profesores y directores de escuela, porque a sus hijos se les prohíbe usar tapabocas, la solución de las autoridades es la de siempre, todos los niños no tienen tapabocas, entonces algunos no lo pueden tener. Es el mismo esquema de siempre, tenemos que mantenernos iguales todos, por debajo, en la pobreza, en la miseria.

Cómo si un país donde se suspendían las clases por cualquier cosa, o sea, cuando el rescate de Elian se estuvo meses sin dar clases, porque los alumnos eran movilizados diariamente para ir a machar frente a la Oficina de Intereses de Estados Unidos en Cuba, si diariamente, cómo, si ya hubo un brote de cuatro alumnos infestados en la CUJAE, las clases, las escuelas, sin tapabocas, pero, además, sin agua, sin jabón, sin baños acondicionados, se mantienen abiertas. No nos engañemos más, que no nos engañen y más, que no nos echen la culpa a los cubanos tanto de adentro como a los de afuera. No existe un baño en una escuela cubana que se parezca a un baño de una gasolinera aquí en Estados Unidos. No existe agua corriente en las casas cubanas y se está diciendo que una de las mejores medidas, además de quedarse en casa, es lavarse frecuentemente las manos. ¿Qué está garantizado, no para la propaganda, sino para poder enfrentar un virus tan agresivo como el Corona?

Esto no tiene que ver con ideología, no tiene que ver con política, el virus no es un virus capitalista, que sólo va a afectar a los más reaccionarios. El virus no se asigna por carnet de identidad, ni por edad, ni por color de piel. El virus llega en silencio, contagia y cuando aparece está multiplicado y multiplicado.

Ahora el gobierno cubano saca de nuevo el Interferón y muchos dicen que, de esta forma se resolverá el asunto Coronavirus porque Cuba tiene la solución. ¿Humanidad o negocio? Señores, se puede ser tan ingenuo o tan imbécil para repetir y repetir sin pensar.

No sé nada de medicamentos, tengo la suerte, como Michael Jackson, de viajar desde hace muchos años con mi médico privado, especialista de todas las especialidades, pero me llama la atención de que en el mismo momento que Cuba está promoviendo su Interferón a gran escala para poder suministrarlo al mundo y así acabar con el virus, tengo a una persona dentro de Cuba en mi familia, no menciono el nombre porque no estoy autorizado y el nombre es lo de menos, que teniendo una hija médico que trabaja dentro de la terapia intensiva de un hospital cubano, no lo ha podido conseguir medicamentos para subir las defensas, porque no los hay. ¡Sólo llegan al hospital 8 bulbos mensualmente!!!!!!!!!.

Si todo estuviera garantizado, a los cubanos le faltaría el agua para beber, pero todos pudieran tomar Interferón para bajar las comidas y pudieran colar café con el “famoso” antiviral cubano. ¿Cómo es que se trata, una vez más, de promover un medicamento para la exportación, mientras ciudadanos de ese país, llevan meses enfermos y no lo encuentran ni en los centros espirituales y el único recurso es llamar al exterior “enemigo” para ver si resuelven algún sustituto?

No nos dejemos engañar más, primero el Interferón, que tiene tres tipos, I, II y III, no es un invento cubano, según he leído se inventó en el Laboratorio Charles Weissmann en la Universidad de Zúrich. Es cierto es un medicamento que se puede utilizar en diferentes patologías como agente antiviral para reforzar el sistema inmunológico, pero no es exactamente una vacuna para resolver, aniquilar y acabar con el Coronavirus. Cuba, es cierto que lo fabrica y debe tener todos los aspectos legales para su comercialización interna y externa, no lo tiene, no existe en los hospitales, ni creo que tenga el dinero suficiente por adelantado para producirlo, sino que estará buscando, un o varios clientes, para que paguen por adelantado para ordenar la producción. Hoy sóloooooo llegannnnnn 8 bulbossssssss a las salas de terapías intensivas de los hospitales mensualmente.

¿El Interferón cubano es bueno? Si claro, tal como lo es la vitamina C. ¿Se puede utilizar para el virus? Si parece que sí, que como apoyo para subir las defensas, como decimos en el argot popular, se puede utilizar. ¿Es exclusivo o el mejor de los interferones que se fabrican? No, parece que, al decir de especialistas en el tema, no es ni tan siquiera de los primeros que se podrían o recomendarían a utilizar en el mundo de la medicina moderna. ¿Se está tratando de resolver el tema del virus por humanidad o por negocio, o sea, se pretende entregar gratis a los países afectados para salvar vidasssssssss, como se necesita ahora, o se pretende vender para obtener dinero para poder financiar la electricidad o el agua? JAJAJA.

Junto al Interferón se dispara el tema médicos cubanos. Cuba tiene un ejército de médicos desempleados, o sea, no colocados en el exterior, por los cuales no está ingresando dinero. Se conoce que todas las misiones médicas cubanas en el exterior son pagadas, no directamente a los médicos, sino al gobierno, que luego da una mascada mínima a los especialistas. No ha existido, ni existe, nada de gratis con relación a esto. Los médicos cubanos son productos a vender al exterior, en la misma medida que en los hospitales cubanos faltan galenos. Mi madre ha sido sometida a un tratamiento en la vista para luego resolver el asunto cataratas, lleva en eso más de un año, cada vez que asiste a la consulta en el hospital especializado en ojos, ha sido atendida por médicos, estudiantes, extranjeros, africanos, chinos, porque los médicos cubanos están en misión en el exterior.

El mismo esquema. La langosta revolucionaria se exporta y se come en casa de los jefes. El buen chocolate y el café cubanos se pueden comprar en París como joyas para que luego los cubanos puedan probar un pedacito, El nieto de Fidel pudo importar una mascarilla de alta generación, pero al pueblo se le está orientando hacer tapabocas con telas viejas. Se promociona como una victoria del gobierno la posibilidad de exportar el Interferón, pero mi familia no lo encuentra a nivel de hospital y menos en el mercado negro, mi madre es atendida por médicos estudiantes chinos, pero ahora los médicos cubanos aterrizan, portando banderas cubanas, bajo lemas de viva Fidel, viva la revolución, o sea, politizando la acción “humanitaria” en Italia, para ayudar a salvar a los italianos.

No es un tema político, es pura y elemental lógica. He visto a España e Italia, países que se prestigian de tener sistemas de salud modernos y fuertes económicamente, declarar que no pueden. Conozco que los profesionales de la salud están trabajando heroicamente 20 horas diarias, durmiendo de raticos sobre sillas y bancos dentro de los hospitales. He visto a médicos llorar frente a las cámaras de sus teléfonos de impotencia y me pregunto, ¿quién salvará al pueblo de Cuba si el virus se propaga, como se ha propagado en el resto de los países, si los médicos graduados cubanos se están exportando?

He visto a una directora de un hospital, cuadro político, exigir a los alumnos de medicina, asustados, que nada pueden saber del virus, sin experiencia real práctica, que tienen que salir a la calle a pesquisar casa por casa a los posibles infestados a cambio de que, si se niegan, perder su carrera de medicina, o sea, no humanidad, no amor, sino inescrupuloso chantaje, en la misma medida que los médicos cubanos bajan escalerillas de avión sonriendo por ir a trabajar a Italia. ¿Cuántos de esos médicos quedarán en el camino por unos cuantos dólares?, ¿Cuál de ellos estará en Cuba para atender a mi madre o mi suegra, que están en edades de alto riesgo? Una cosa es salir a cazar mosquitos con una linterna vieja y otra es tener contactos con posibles infestados de Coronavirus, sin ropa adecuada, sin mascarillas, sin recursos reales, sin Interferón en casa, sin respiradores, sin hospitales acondicionados para este problema.

Hoy los médicos son joyas, son personas insustituibles a conservar, a preservar como capital calificado para cuando haga falta. Cuba no tiene médicos para enfrentar un brote masivo de la enfermedad. Cuba tiene ahora mismo médicos productos comercializables, para una vez más, primero obtener dinero en secreto y segundo, seguir favoreciendo a la propaganda globo, mentirosa, inexacta, de la que siempre ha hecho alardes. Si es cierto, los médicos cubanos podrán ayudar a Italia, igual que la langosta cubana ha nutrido y alimentado siempre a franceses, italianos, españoles, canadienses, pero ...

Los creyentes, por favor, refuercen o redoblen sus rezos.