martes, 17 de noviembre de 2020

A veces me parece que vivo en un mundo diferente. (Segunda Parte)

En su declaración el día 5 de noviembre, la Secretaria de Estado, del estado de Pennsylvania, máxima autoridad para los fines electorales dio unas declaraciones donde trató de aclarar funcionamiento de las elecciones y conteos. Todavía en ese momento, se estaban contado los votos que llegaron por correo. Ella dice que, a diferencia de procesos anteriores, este año muchas boletas llegaron por esa vía.

En el minuto 2:56 de su intervención, junto a su cara, proyectan una imagen del estado de las votaciones hasta ese momento. Ella dice:

  • 20 votos electorales     93% de votos contados.
  • Contienda Reñida
  • Diferencia: 90 542 votos
  • Trump 50,1% = 3 247 808 votos
  • Biden 48,6% = 3 157 266 votos.

O sea, esto refuerza la idea de Trump dada el 4 de noviembre a las 2:30 am. Cuando inexplicablemente el conteo de votos se detuvo él estaba ganando. Se había contado el 93% de los votos presenciales y la diferencia era de más de 90 mil votos a favor de Trump. Esto no lo digo yo, lo dice la Secretaria de Estado al utilizar como apoyo una imagen que colocó al lado de su cara.

Trump dijo, estamos ganando y en realidad estaba ganando. Con el 93% de los votos contados, él tenía el 50,1% de los votos, su adversario tenía el 48,6%. Entonces luego del parón, se hizo la MAGIA, aparecieron los votos que cambiaron todo. De forma inexplicable, casi todas las boletas, no puedo poner de forma segura la cantidad ahora, pero seguro la encuentro luego, venían a favor de Biden. Según testigos, ellas sólo votaban por el demócrata, o sea, en muchísimos casos, no se habían llenado o votado por el resto de los cargos. Los votantes, sólo pusieron la cruz sobre Biden y no estuvieron interesados en marcar por más nada.

¿Esto no parece extraño? Votación, Trump ganaba, no lo digo yo, lo dice la Sec. del Estado de Pennsylvania, se detuvo el conteo, (cosa que Trump no puede hacer, no estaba en ese estado y no pudo haber ordenado, no es una autoridad autorizada), miles de boletas entraron cuyo único candidato beneficiado fue Biden, en muchísimas de ellas, solo aparece marcado el voto para presidente, lo que da a entender que los votantes, que votaron desde su casa, días antes, no tuvieron tiempo para llenar el resto, o se les olvidó o no les interesaba tan siquiera ni votar por los representantes del estado. ¿Esto no parece extraño? Podría dar a pensar, a los malos pensadores, que a última hora se trató de cumplir con la norma, o peor, sobre cumplir el plan de votos y meter boletas y más boletas. Podría dar a pensar

Les dejo el enlace:

Youtube: https://www.youtube.com/watch?v=fcPYWxFRJKw

Ahora una parte de los votantes demócratas y la mayor parte de las televisoras, periódicos, etc., dicen que Trump y los republicanos están dando una pataleta, están tratando de demorar y obstaculizar las elecciones, que han pedido revisar sin razón porque no existen fraudes, ni tan siquiera irregularidades, pero seamos honestos, ¿cualquiera de nosotros, con el derecho que da la ley, no hubiéramos hecho lo mismo? Yo creo que sí. Es sencillamente reclamar un derecho que existe y está reglamentado por la constitución y por las leyes norteamericanas. Los demócratas que compitieron y su público dentro e incluso fuera de los Estados Unidos están dando gritos de: ya dejen eso, no pasó nada, no hace falta contar nada, ganamos, ganamos, no hay fraude, Trump es un malcriado, que no quiere irse de la Casa Blanca, porque no tiene casa y los republicanos son todos unos estúpidos e ignorantes que se ha dejado comprar por la ayuda que el presidente les dio. Ganamos, ganamos, no hubo fraude.

Si los demócratas que se sienten ganadores y ya exhiben a un presidente, no tienen nada que esconder y están super seguros de que nada, tan siquiera extraño, ha ocurrido, deberían ser los primeros reclamando la verificación, porque tal como dice el refrán, “el que no la debe, no la teme”. Los demócratas, ganarían mucho para la historia presente y futura de este país lidereando las investigaciones, entonces cuando quede demostrado que no existen irregularidades, cuando la reclamación por fraude no se pueda probar, cuando Trump, su gobierno, su equipo de abogados, queden desmoralizados por las leyes norteamericanas, podrían salir a celebrar.

De lo contrario, no sólo están jugándose una presidencia por 4 años, sino, a decir de los expertos, el enjuiciamiento de los que provocaron todo esto y, además, la mismísima afectación e incluso desaparición del partido demócrata. La final del proceso, como estamos en Estados Unidos y esto no se parece a nada, cada ciudadano afectado, o sea, en este caso cada republicano, podría demandar frente a las cortes al Partido Demócrata. Oh, si, cada ciudadano tiene el derecho de demandar. No tenía yo tanta información, pero parece ser que los demócratas en varias ciudades y estados de este país tienen fama reconocida e histórica de cometer fraudes, no sólo a nivel de elecciones presidenciales, sino a nivel de elecciones estatales para senadores y gobernadores en la historia más reciente de los Estados Unidos. No sabía yo que el propio John F. Kennedy, demócrata, reconoció, lo que luego se publicó, que su triunfo frente a Richard Nixon se había debido a maniobras por detrás del telón de varias fuerzas, incluyendo a la mafia, pero que Nixón, el que sabía que eso había ocurrido prefirió no reclamar. Y ahí está la diferencia o equivocación, si creen que Trump va a actuar como Nixón se equivocaron en pensar así. Por la personalidad del amigo, se gastará hasta el último dólar para demostrar lo que ha dicho. Será capaz de empeñar la Torre Trump, sólo para no quedarse dado, como decimos los cubanos.

¿Se puede pensar que el amigo tenga a un gobierno entero, más a un grupo enorme, que crece día a día, de abogados prestigiosos alrededor del país trabajando para este caso, y que todo sea mentira, que no tenga elementos, que todos los que están apoyándolo en esta estrategia son anormales, no les importa su profesión, sólo quieren divertirse y ganar algún dinerito extra?, ¿De verdad se cree que llevar todo esto a la Corte Suprema de los Estados Unidos, paralizar al mundo, no es serio? Que poco se puede saber de la vida. Esto no es un caso de acusación por no cumplir obligaciones de manutención, o por haber chocado borrado. Esto no es un caso ni tan siquiera de una acusación de asesinato de una mujer negra, por un novio celoso blanco. Esto es, si no el más, uno de los más sonados casos de acusación de fraude federal de la historia de este país, cosa que como dije tiene que ver con nosotros e increíblemente con gobiernos y millones de personas que no viven aquí y están pendientes porque la solución tiene consecuencias también para ellos. Esto no es el fatídico y lamentable caso de la desaparición de un niño, esto, de lo que se está hablando es de una conspiración de un partido político, que se acusa de tener apoyo desde el exterior, para cambiar por vías “irregularidades” la historia no de un gobierno, sino de un país entero. Es fuerte.

Apeguémonos a las definiciones:

Irregular: Del latín “irregularis” es un adjetivo que permite nombrar a lo que está fuera de regla o resulta contrario a ella. Acciones que, al no hacerse conforme a las reglas, pueden constituir un delito.  Algo irregular es sinónimo de anomalía, anormalidad, alteración, trastorno, desorden desigualdad. Una irregularidad es una acción en la gestión o administración pública o privada, que no se hace conforme a las reglas y puede constituir una falta o delito

¿Contradiciendo lo que está regulado por la ley electoral, se detuvieron o no los conteos en la madrugada del 4 de noviembre?

Fraude: Proveniente del latín "fraus" y "fraudis", es sinónimo de engaño, inexactitud consciente, contra una persona o institución para obtener algún aprovecho, mientras que la otra parte es la perjudicada. Es una acción contraria a la verdad y a la rectitud, que perjudica a persona contra la que se comete. Es un acto tendiente para eludir una disposición legal en perjuicio del Estado o de terceros y un delito que comete el encargado de vigilar la ejecución de contratos públicos o privados, confabulándose con la representación de intereses opuestos.

El fraude electoral es la intervención ilícita de un proceso electoral con el propósito de impedir, anular o modificar los resultados reales ya sea aumentando la cantidad de votos del candidato favorecido, disminuyendo las de los candidatos rivales, o ambas.

Específicamente en el caso de las elecciones existen tipificados varios diferentes:

1.- Fraude electrónico: corrupción en los sistemas informáticos que cuentan los votos.
Fraude mediático: no en las urnas, sino durante la campaña.
o         Desequilibrar las campañas de los candidatos en los medios
o         Favorecer a un candidato
o         Desacreditar a un candidato, generalmente de la oposición.

2.- Fraude en las urnas: el más común en el mundo, se da cuando de alguna manera un candidato se hace de votos falsos, pero avalados por una boleta, se puede encontrar en las famosas casillas zapatos, el carrusel loco, etc., también se la llama "embarazar una urna" si ésta ya tiene votos indebidos al momento de comenzar los votantes a depositar su voto o quema de urnas por parte de personas afines para destruir preferencias contrarias.

Existen entonces definiciones dentro de esto que se llama fraude electoral, llamadas “Técnicas” que van tipificando las acciones y resultados que pueden aparecer, en dependencia de los países, tipo de elecciones, etc. Entre ellas, por sólo mencionar algunas, están:

1.    Suplantación del elector, consiste en que otra persona vota en lugar del elector, por ejemplo, personas que han fallecido.

2.    Quema de Urnas, lo que impide computar la elección, quedando nula.

3.    Coacción o presión al elector para impedirle que libremente elija el candidato o una opción propuesta. Una forma es el acarreo de votantes, o traslado de personas, por parte de dirigentes políticos, al colegio electoral con el fin de que depositen el voto a su partido.

4.    Compra de votos

5.    Sustracción de ánforas con cédulas o paquetes de actas electorales antes de que fueran debidamente computados.

6.    Adulteración de las actas de elección modificando las cantidades de sus resultados auténticos.

7.    Sustitución de paquetes electorales, actas, etc.

8.    Embarazo de urnas”, es decir, introducción de fajos de boletas previamente votadas en las urnas para inflar la votación de una candidatura, partido u opción electoral.

9.    Caída de los sistemas de cómputo en red para confundir a la opinión pública y manipular los resultados electrónicamente.

10. Utilización de recursos ilícitos para aumentar el gasto de campaña y obtener ventaja ilegal en la publicidad.

11. Complicidad con funcionarios de los procesos electorales para ocultar las evidencias del fraude electoral.

12. Intervención del Gobierno, para favorecer a un candidato, partido o propuesta electoral, mediante propaganda maliciosa o ejecución de obras concretas ofrecidas por el candidato o partido al que se quiere favorecer de manera fraudulenta.

13. Control de los medios de comunicación para confundir y engañar a los electores.

14. Concentración de medios informativos e información sesgada y favorable a los grupos de poder con los que trabajan dichos medios.

15. Uso de la fuerza pública contra los inconformes.

16. Falsificación de firmas a favor de inasistentes y sellado etiquetado de sus DNI, lo que facilitará trámites judiciales y financieros y afectará el rubro de votos viciados y en blanco.

17. Manipulación de los sistemas de cómputo.

18. Soborno de las personas que cuentan los votos.

19. Voto en cadena. Permite la compra de votos, el primero que entra a votar, pone otro sobre (no el autorizado, sino uno cualquiera) probablemente ese voto quedará impugnado, pero se lleva consigo el sobre válido. Luego introduce en él una boleta de su partido y lo cierra bien, luego puede organizar una cadena de votos asegurándose que son a su favor, aunque haya cuarto oscuro. A cada persona, le ofrece alguna recompensa, si trae el sobre vacío a cambio de llevarse el sobre lleno. De utilización frecuente en zonas de bajos recursos donde punteros políticos organizan la cadena.

No podré en este espacio argumentar sobre todo esto, es imposible, por el volumen de información que existe y por los determinados procesos que se están llevando a cabo ahora mismo en cada uno de los estados impugnados por los republicanos, no existe una respuesta definitiva. Puede ser que escriba que es rojo y ahora mismo los encargados estén definiendo que es azul o viceversa y no me van a llamar para que yo se los escriba. ¿Existe el fraude comprobado, o sea, las instituciones encargadas de probar el fraude lo han hecho? No. Pero si han detenido conteos y dado órdenes al FBI para que investiguen y averigüen. Todos los que vivimos aquí sabemos que, cuando, en buen cubano, se “tiran” los federales, todo lo otro va para atrás.

No es mi objetivo convencer a nadie, porque si no le gusta la piña, por muy rica que yo se la describa, no se la va a meter en la boca. Solo quiero dejarles aquí una conferencia que diera Rudy Giuliani, hace 3 días, para que pueda escuchar a alguien que le está hablando al país y al mundo frente a una cámara de TV.

Giuliani, una de las figuras más conocidas dentro de la política norteamericana, por sus indiscutibles e inigualables actuaciones en New York en el período 1994-2001 y dentro de las salas de juicios de todo el país, con un average de miles de juicios complicados ganados, está lidereando la reclamación de su amigo Donald Trump. Giuliani es un anciano de casi 80 años, con un balance en su carrera reconocido y prestigioso que se está arriesgando a perder todo lo que ha logrado si se prueba que lo que dice es falso. Giuliani, no es un periodista escondido detrás de una máscara por el virus, no es un canal de TV repetidor, no es un “influencer” detrás de una determinada red social. Es un abogado, por cierto, que comenzó como demócrata en la vida política, hoy republicano, que ha apostado su nombre, su cara y carrera, que ya tenía con muchos méritos antes de que Trump fuera mencionado en la vida pública por primera vez, para demostrar lo que el presidente actual ha llamado “pantano”.

¿Alguien puede creer que este también es un viejo loco o que está necesitado de vender su alma al Diablo, nunca mejor esa frase para este caso, por dinero? Que poco sabemos de la vida.

Para los más convencidos demócratas o para los que se divierten con este espectáculo, escuchen a Giuliani, el tipo no está diciendo que el fraude ha sido aprobado por la Suprema Corte, no puede decirlo porque es responsable, decente, honesto y sabe lo que se trae entre manos. No se está tomando un Chibas Regal “Royal Salute” para festejar. Está trabajando. Giuliani, está, por arribita, demostrando, para destruir a los que dicen que no hay “irregularidades”, incluyendo a la mayor parte de la prensa de este país, evidentemente parcializada, que tienen las pruebas escritas, las declaraciones juradas, las fotos, o sea, palabras mayores, que avalan que los demócratas han querido robarse estas elecciones, que eso será presentado a la Suprema Corte de los Estados Unidos, algo así como al “Monte del Olimpo” lugar donde según la mitología griega vivían los dioses. De ahí para arriba, no hay más nada de seres humanos vivos.

Aquí les dejo el enlace. Existe otro que está subtitulado en español, pero no lo encuentro mientras escribo.

YouTube: https://www.youtube.com/watch?v=SzHnlLxKhSc

Ver a Giuliani, les adelanto, a mí no me parece loco, ni olvidadizo, menos inexacto, menos fuera de sus capacidades intelectuales al máximo, escucharlo y, sin que nadie le diga nada, sin que alguien pueda sembrarle la idea de una conspiración, pensar entonces sólo en dos palabras: irregularidades y fraude.

 

 

 

 

 

 

 

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